Teresa nos deja. Llevaba diez años en Monleras, ocupándose de la salud de todos.
Perdemos a una gran profesional, exigente en su trabajo, preocupada por los pacientes, a quienes hacía un seguimiento personalizado y ejemplar.
Teresa intentó siempre ir más allá de lo estrictamente obligatorio en el desarrollo de la atención primaria. Gracias a ella hemos contado en Monleras con servicios inusuales en muchas otras localidades.
Hacía años que no salían a concurso las plazas de los médicos. Ahora, al convocar
Teresa se marcha a Fuentes de Oñoro. Le ha costado mucho aceptar un traslado que ella no quería.
En nombre del pueblo, le agradecemos sinceramente su dedicación y los servicios prestados en estos años.