El veterano grupo palentino Carrión Folk mostró, el
pasado sábado 18 de julio, su espectáculo Zéjel,
música folk y fusiones de danza. El concierto estaba incluido en la
programación de la Red de Circuitos Escénicos de Castilla y León y contó con la
colaboración de la bailarina Neftis Paloma.
En el programa de mano podía leerse:
En las Navidades de
1996 nace el grupo Carrión Folk. En 1998
graba su primer disco “Enramada”. A partir de este trabajo discográfico, la
peculiar técnica interpretativa de Carrión ha ido ampliando timbres instrumentales
aplicándolos a un exquisito repertorio que brota de la tradición castellana,
sobre todo palentina, y se enriquece con las aportaciones de estos músicos. Es
hoy una de las más importantes e innovadoras formaciones de música folk de
Castilla y León.
En el zéjel, muy
popular y de mucho éxito en los reinos cristianos cuando convivían las tres
culturas (cristiana, judía y árabe), unos juglares tañían los instrumentos,
acompañados en las grandes ocasiones por bailarinas.
Juglares: siete
músicos de Carrión Folk interpretan temas castellanos, respetuosos con la raíz,
al tiempo que atrevidos, con la fusión de las tres culturas. Provienen de
formaciones de música de cámara, han caminado en el pop, improvisado en el jazz
y experimentan con melodías y ritmos de raíz para llenar el aire de colores
tímbricos y percusiones tan múltiples como sugestivas.
El grupo lo forman:
María Alba (voz, coros y percusiones: djembé, darbuka,
bongós, pandero, pequeñas percusiones),
Pablo Abad (violín,
pito de llaves, tin whistle y gaita),
Alfonso Abad
(contrabajo y percusiones),
Andrés Flórez
(guitarra española),
Ángel Abad (atabal,
cajón, djembé, darbuka, pandero cuadrado, bongós, pandereta y pequeñas
percusiones),
Y un folklorista,
Pedro Pablo Abad ,(mandolina y bandola).
La bailarina de la
Compañía Isis, Neftis Paloma, profesora, creadora e intérprete de coreografías mágicas y
elegantes (mantos, abanicos de seda,
grandes alas de Isis, velos, faldas de giro derviche, candelabros...). A la belleza tímbrica y rítmica de Carrión
folk se unen los ricos movimientos y el esmerado vestuario de las exquisitas
danzas.