martes, 27 de agosto de 2013

Falleció el sacerdote capuchino Francisco Iglesias

Francisco Iglesias, sacerdote capuchino nacido en Monleras, falleció el pasado 22 de agosto en Salamanca. Reproducimos a continuación la nota necrológica facilitada por la propia Orden Capuchina y que contiene apostillas de Gregorio Criado Cordobés (alumno de D. Valentín, padre de Fray Francisco) y Argimiro Cordobés (ex_seminarista capuchino) tal como aparece en http://www.foro-ciudad.com/salamanca/monleras:
Seguramente desconocido para los más jóvenes aunque no tanto para los que fueron alumnos y discípulos de D. Valentín –condecorado con la Medalla de Alfonso X El Sabio- y Dª Lucinda, maestros de Monleras durante casi 30 años, el pasado jueves, 22 de Agosto de 2013 falleció en Salamanca su hijo, Hermano Capuchino, Francisco Iglesias (Fray Donato de Monleras). Ha sido éste quizá una de las figuras salmantinas contemporáneas más preclaras. Nació en Monleras el 26 de Enero de 1927 siendo el segundo de seis hermanos: Ignacio (Jesuita), Aurora (Jesuitina), Luis (casado), Angelines (ya fallecida) y Manuel (Jesuita). En 1938, con nueve años, Francisco ingresó en el Seminario Capuchino de la Provincia de Castilla. El 1º de Marzo de 1950 se ordenó sacerdote en León. Ese mismo año se licenció en Teología en la Universidad Pontificia de Salamanca. Marchó a Roma donde se doctoró en Teología Dogmática por la Universidad Pontificia Gregoriana y volvió a España como profesor y director de Teólogos. Fue Ministro Provincial de la Orden Capuchina (1963-1969) y Rector del Colegio Internacional San Lorenzo de Brindis (Roma 1972). En 1976 fue elegido Definidor General de la Orden –consejero del Superior General para la península- cargo que desempeñó hasta 1982 en que pasó a ser Vicario General. El 15 de Abril de 1987, el papa Juan Pablo II le nombró consultor de la Congregación de Religiosos e Institutos Seculares. Reelegido, de nuevo Definidor General en 1988, simultaneó este cargo con el de Procurador General de la Orden Capuchina, encargándose así, fundamentalmente, del trámite de asuntos de la Orden ante el Vaticano. Un escrito del Hermano Mauro Jöhri, Ministro General de la Orden, lo define como “…modelo de Fraile Capuchino, austero, coherente, respetuoso con los hermanos, infatigable en el trabajo y siempre disponible….” En Setiembre de 2009 volvió al convento capuchino de Salamanca dedicándose a la asistencia pastoral y formación permanente de las hermanas franciscanas, a la reflexión e investigación teológica.

D.E.P.